5 consejos para manejar una crisis sensorial en niños neurodivergentes

Las crisis sensoriales no son berrinches ni actos de desobediencia. Son respuestas intensas del sistema nervioso ante estímulos abrumadores. Saber cómo actuar en esos momentos puede marcar una gran diferencia para el niño y quienes lo rodean.

Ana Maria Domínguez - Zaira Rodríguez

5/19/2024

1. Mantén la calma tú primero

Tu tranquilidad transmite seguridad. Respira profundo, evita levantar la voz o moverte de forma brusca. Si tú estás calmado, ayudas a que el niño también pueda regularse poco a poco.

2. Reduce estímulos de inmediato

Apaga luces fuertes, sonidos intensos o retira al niño del entorno si es posible. Usa auriculares con cancelación de ruido, gafas oscuras o una manta pesada si eso lo ayuda a calmarse.

3. Usa lenguaje simple y claro

Durante una crisis, el niño puede tener dificultad para procesar palabras. Habla con frases cortas y suaves, o usa apoyos visuales si los conoce: pictogramas, gestos, tarjetas de emociones.

4. Respeta el espacio del niño

No lo toques a menos que él lo permita o lo necesite para su seguridad. Algunos niños se calman con presión profunda, otros necesitan estar solos. Observa y responde sin invadir.

5. Después de la crisis, valida y apoya

Una vez que el niño se haya calmado, acompáñalo emocionalmente. Puedes decir:
“Sé que fue difícil, estoy aquí contigo”.

Evita regaños. Aprovecha el momento para identificar qué lo desbordó y escribe tus observaciones, esto te ayudara a prevenir futuras crisis.